Lo que haya ocurrido tenía que ocurrir, cada instante forma parte de las circunstancias y motivos que nos llevaron a ese lugar; interviene la voluntand conocida tambien como “LIBRE ALBEDRÍO”; Durante toda la vida se nos ofrecen pistas que nos recuerdan la dirección; si no prestamos atención, tomamos malas decisiones. Si ponemos atención aprendemos las lecciones y tendremos una existencia feliz y plena.Muchas de las pistas que se nos ofrecen pueden surgir en forma de preguntas desde la infancia: ¿Por qué nací aquí? ¿Por qué era tan duro mi padre? ¿Por qué mi madre era tan cariñosa? ¿Por qué a mí?Toda persona tiene un espíritu, ángel guardián, ser de luz o guía; como se quiera llamarles. Ellos nos ayudan en la transición entre la vida y la muerte así como también a elegir a nuestros padres antes de nacer. En esta etapa tenemos comunicación y pleno conocimiento de las razones por las cuales se nos pide o más bien sugiere vivir ciertas experiencias que tienen como objetivo únicamente llevarnos a un aprendizaje y crecimiento espiritual. El conocimiento involucra las razones por las cuales nos relacionaremos con personas que nos amaran y otras que nos harán daño sin razón aparente alguna. El karma intervendrá es decir si hicimos daño debemos experimentar como victimas para comprender el dolor que causamos. En otras ocasiones muchas de las personas con las que nos encontraremos así como nosotros mismos por diversas razones demoramos el aprendizaje de las lecciones que nos enviaron a aprender en ese caso cometeremos errores que nos harán daño así como a las personas que nos rodean; repitiendo vivencias hasta que la lección sea comprendida.
Al crecer se pierde el camino y más de una vez pedimos a gritos una luz que nos ayude a revelar las cosas que suceden a nuestro alrededor sin saber que las respuestas se encuentran dentro de uno mismo.
